Los diseñadores son los que hacen un traje a la medida, con las restricciones tecnológicas y sobre todo económicas, para lograr un objeto de diseño no sólo contemporáneo sino innovador. Los objetos suelen depreciarse, pero cuando están diseñados se revaloran hasta convertirse en iconos o clásicos.
El diseño es la solución de los problemas de la forma del objeto y su fabricación; cuando se tiene un enfoque de adelantarse a la época para el siglo XXI, la inversión es un capital. Un proyecto es la realización de planos constructivos, pero no es diseño de la forma.
La mayoría de escuelas enseñan cómo hacer proyectos porque es más técnico. Para enseñar diseño se requiere otra metodología relacionada a la creatividad y el arte plástico.
La propuesta de la Universidad Gestalt de Diseño, es la vinculación de las áreas: el lenguaje del diseño es Gráfico, la metodología del diseño es Industrial y la teoría es de Arquitectura. Por ello el programa es eficiente e irrepetible, aunque lo copien por partes porque todas las materias se llevan como taller de diseño con el mismo lenguaje.
Estudiar en un Centro de Diseño especializado -y no en una universidad de administradores- es diferente por la metodología y sus productos. Y no es porque no se estudien las materias técnicas, todas tienen aplicación al enfoque del diseño.
El énfasis académico está en las áreas humanísticas y sobre todo en la sustentabilidad, porque esa es la misión de la Universidad: diseñar productos que no resulten basura y que sirvan para mejorar el medio ambiente.
